Lo que no leíste sobre la nueva app CuidAR

Finnegans contribuyó con toda la industria en crear la App para combatir el COVID-19

 

Blas Briceño es el fundador y CEO de Finnegans, y actuó en representación de nuestra empresa para hacer la coordinación general del proyecto CuidAr, que se llevó a cabo con equipos de trabajo de otras siete empresas involucradas: Globant, Hexacta, C&S, G&L, QServices, Gestión IT y Intive.

 

CuidAr es una aplicación, tanto para dispositivos IOS y Android como para web, que permite a ciudadanos argentinos realizar un test de autodiagnóstico cuyo resultado permite identificar casos sospechosos que puedan ser recibidos por los sistemas nacionales de salud. A través de la geolocalización, la aplicación permitirá la recolección de datos que servirán a futuro para controlar mejor el cumplimiento del aislamiento de los infectados.
La aplicación brindará datos relevantes de estados de salud, demográficos y geográficos que permitirán monitorear mejor focos de infección.

Se conecta con otra aplicación que permite gestionar los usuarios derivados a centros de salud (COEP, Comité Organizacional de Emergencia Provincial). Esta aplicación recibe a los ciudadanos que a través de la aplicación realizaron un autodiagnóstico positivo y los asigna a los diferentes organismos provinciales, permitiendo gestionar fechas de cuarentena, estados y visualizar la situación de cada uno de los ciudadanos derivados.

En este mismo proyecto se desarrolló una aplicación de Dashboard, que es un tablero de control que permite a los funcionarios de gobierno dar seguimiento y tomar decisiones con información actualizada mediante el acceso a gráficos y totalizadores

1) ¿Cómo surgió el proyecto CuidAr y cómo fue que decidiste formar parte?

Al inicio de esta pandemia, desde la Cámara Argentina de Software (Cessi) empezamos a pensar distintas propuestas para ayudar, desde la tecnología, a toda la sociedad. Armamos una base de distintas posibles iniciativas para llevar adelante y proponerle al gobierno. Tuvimos una reunión con Alberto Fernández para presentarselas y él nos convocó a trabajar desde los actores tecnológicos. A partir de eso seguimos trabajando con la Secretaría de Innovación Pública de la Jefatura de Gabinete para determinar cuál de esas iniciativas que veníamos conversando podía tener uso real. Una de ellas era justamente la gestión de diagnóstico y prediagnóstico de COVID-19. El gobierno ya había comenzado una aplicación propia para diagnóstico, pero a las pocas semanas de su liberación se dieron cuenta de que no tenían la capacidad de hacer una aplicación de uso tan masivo, con la profundidad y la calidad que se necesitaba.

Entonces nos convocaron, finalmente, para ayudarlos a lanzar esa aplicación que hoy es CuidAr. Yo ya estaba coordinando las distintas iniciativas de apoyo solidario en la cuarentena desde la Cessi y me sumé. Cuando nos reunimos, inmediatamente se armó un grupo de empresas, que al principio fueron nueve pero solo pudimos coordinar el trabajo para ocho. Estas ocho empresas tomamos distintos aspectos del proyecto que nos habían pedido y en menos de 24hs se distribuyeron las responsabilidades. Se armó un grupo de coordinación para hacer la gestión tanto con el gobierno como entre los equipos de trabajo de las empresas. De ese equipo participé en representación de Finnegans en la coordinación general del proyecto.

2) ¿Qué aprendiste durante el proyecto que sientas que puede ser importante para transmitir?

Aprendí que la calidad profesional de las personas involucradas en este proyecto es excepcional. Era una especie de Selección Argentina del Software. Pude ver un talento y una capacidad de articulación tremenda. Me sorprendió mucho la velocidad con la que se articuló el trabajo entre estas empresas, que son competidoras en en el mercado pero que rápidamente pusieron a disposición sus recursos, sus formas de trabajo, sus herramientas tecnológicas y se fueron distribuyendo las actividades. La capacidad logística y organizacional de todo el conjunto fue realmente increíble, de hecho nadie pensaba que podía salir, por lo menos no en el tiempo que finalmente salió.

Aprendí también que se puede hacer una aplicación de clase mundial con empresas argentinas trabajando juntas. Si bien desde afuera parece solo una aplicación para hacer un autodiagnóstico, es una aplicación bastante compleja porque involucra varios sistemas. La experiencia fue de haber estado en un grupo de élite y ese grupo de élite está conformado por empresas argentinas, que además donaron todos los recursos. El trabajo que hicimos fue una donación a la sociedad y al gobierno, que involucró, en total, más de 110 personas trabajando en la aplicación a lo largo de tres semanas, y eso es un montón de dinero.

3) ¿Cuán importante creés que puede ser la unión entre trabajadores de las empresas de tecnología para el futuro del software en nuestro país?

La Cámara Argentina de Software tiene una historia de trabajo colectivo y organización de grupo. Este proyecto es una constatación de la potencia que tiene la industria y el valor que tiene la industria para la sociedad. Creemos que este proyecto puede una conciencia del Estado respecto de la importancia de la digitalización y de la capacidad que tiene la industria de ayudar en esa digitalización. Eso es lo que veo de acá para adelante. Mostramos que se puede hacer un trabajo de muchísima calidad en muy poco tiempo y que la industria argentina está a la altura de la industria coreana, taiwanesa o norteamericana para construir software.

4) Con lo importante que es construir buenos profesionales de tecnología en nuestro país, ¿qué crees que tiene Finnegans para ofrecer para que los profesionales vengan a trabajar y a formarse con nosotros?

Finnegans es una organización que se propone desarrollar software de clase mundial y dar soluciones de gestión de negocios para ayudar a las organizaciones argentinas y latinoamericanas a incorporarse al mundo digital más rápidamente. Creemos que acompañando a las empresas a formular sus procesos de negocios y a automatizar sus prácticas puede mejorar la eficiencia y la productividad de todas las actividades. Es un desafío que involucra usar la tecnología de la forma más innovadora posible.
Nosotros tenemos el propósito de ser agentes de transformación de la sociedad a partir del desarrollo del software pero también tenemos un propósito de inclusión social a través de la tecnología. Por eso tenemos programas específicos de apoyo a las ONG o al gobierno, como fue con el caso de CuidAr. Ser parte de Finnegans es compartir estos propósitos y colaborar para que ellos tengan el desarrollo adecuado. Simultáneamente, es aprender y vincularse con la mejor tecnología de hoy, y con un equipo permanentemente desafiado para dar lo mejor de sí.